¿Alguna vez has soñado que estás desnuda en lugar público? ¡Uy! Que terrible sensación de indefensión. Totalmente fuera de tu control.
Una sensación parecida tuve esta pasada despedida de año. Me sentí desnuda, confrontada ante mis sueños y metas de crecimiento personal.
El 2019 pasó y ni cuenta me dí.
Antes de que pudiera llevar a cabo lo que tenía en mente para el 2019, ya estaba en una fiesta familiar, lista para recibir el 2020.
¡Wow! Es increible como nos pasan las horas, los días, ¡un año! y ni siquiera nos damos cuenta.
Tenía como meta en el 2019, leer más. (Leer más y usar menos el maldito celular. ¡Que mucho tiempo perdemos en el!) -BTW, Al final te dejo un link sobre algunos beneficios de la lectura.-
Total de libros leídos en el 2019: Uno (1) y otros dos que dejé a mitad.
Tenía como meta en el 2019 hacer ejercios por lo menos tres veces por semana de manera consistente.
Aeemmmm… Mejor ni mencionemos lo que hice de ejercicios (o más bien lo que no hice). 😒
Pantalones Abajo
Considerando que pasaron 365 días del 2019; y el 2020 me agarró con “los pantalones abajo” (como dicen los viejitos de “enantes”) estoy convencida de que este año debería tener un plan más concreto de lo que quiero alcanzar y en efecto cómo lo haré.
Así las cosas, he de trabajar con mis metas personales con la misma seriedad con la que organizo mi agenda como secretaria legal. (Porque cuando trabajas con abogados, siempre que ellos puedan, la culpa será de la secretaria.)
Después de todo, el crecimiento personal, debe ser una prioridad. Y ahí sí que sí, que la responsabilidad es toda nuestra.
“Una meta, sin un plan es simplemente deseo. “
Antoine De Saint Exupery
En Resúmen
Lo que quiero traer a tú atención (y a la mia, porque también escribo para confrontarme a mí misma) es que si no agendamos tiempo para nuestras metas personales, cuidado personal y crecimiento, nunca encontraremos el espacio para trabajar en ello.
Siempre habrá una tanda de ropa que lavar y doblar.
Nunca faltarán trastes sucios.
Jamás faltará algo (en FB/IG) en qué entretenerse (o perder el tiempo).
Que no nos pase otra vez
Así que, para que no nos agarre el 2021 en “panties”, será necesario que nos tomemos unos minutos para meditar y hacer un plan.
Preguntas vitales:
¿Qué queremos alcanzar?
¿Cómo lo alcanzaremos?
En mi caso particular, deseo enfocarme este año en la lectura. (Lo que quiero alcanzar.)
Una o dos metas. No hay que ser demasiado ambiciosas.
¿Cómo lo alcanzaré? Dedicando al menos veinte (20) minutos diariamente a ello.
¡¿20 minutos?!
Antes de que entres en histeria, voy explicar de donde planifico sacar (y estoy sacando) 20 minutos diarios, con un empleo a tiempo completo, familia, mantenimiento de dos casas (yeap, dos propiedades, somos una familia “licuada”, el tiene su casa y yo la mia) tareas escolares, una cabina de estética en proceso y tratando de hacerme de un nombre como blogger. Phew! Suena mucho. Lo sé.
Con mayor razón, por mi bienestar mental, debo nutrirme de conocimiento.
¿De qué hablaba?
Ah, si. Te iba a contar de donde estoy sacando los 20 minutos. Pero creo que eso lo dejamos para otro post. Ya este está medio largo.
20 minutos serán un buen comienzo para llegar a donde quiero. 😉 Un total de cuatro (4) libros leidos durante el 2020.
Creo que ya estoy hablando demasiado. Les debo un update de mis Reflexiones de Mitad de Año y lo que descubrí con ello. We’ll get into that soon.
¿Qué tal tú? ¿Qué te propones alcanzar en el 2020? Me encantaría saber.
See you on my next one.👠💕
Aquí los enlaces de algunos escritos relacionados con los beneficios de la lectura. 👇🏽👇🏽